
¿Cómo podemos cuidar nuestro sistema nervioso?
En una situación de limite nuestro sistema nervioso es capaz de trabajar a una velocidad increíble para evitar una catástrofe.
Los sensores de dolor son señales eléctricas que llegan hasta nuestro sistema nervioso que viajan hasta el cerebro. Los nervios del dolor son mas lentos, por lo que a veces no tenemos dolor intenso en el mismo momento de la lesión, sino que aparece al cabo de segundos o minutos, e incluso horas después de esta.
La percepción del dolor es diferente de unas personas a otras, como con el resto de las demás cosas. La variación de este tiene un componente emocional, y es el que modifica la manera en la que una persona percibe el dolor.
También sucede que los sensores, en caso de accidente, no van directamente al cerebro, sino que pasan por la medula espinal, aquí se desactivan y el cerebro ordena la liberación de endorfinas, por eso desaparece el dolor momentáneamente, estos calmantes naturales son mas fuertes que la morfina, esto sucede para que el cerebro no perciba el dolor durante unos segundos, en caso de lesión grave nos dará unos minutos para poder reaccionar sin dolor y poder actuar.
Tenemos más de un millón de pequeños sensores debajo de la piel que nos transmiten información sin procesar y 72 Km de fibras nerviosas que nos permiten responder a una increíble velocidad. Esto permite reaccionar al cerebro ante el más mínimo estimulo. Imagina que ese estimulo esconde un grave peligro, pues el cerebro alerta casi antes de percibirlo.
Tenemos medio millón de sensores y el mecanismo de comunicación más sofisticado del planeta y justo esta debajo de nuestra piel. Estamos equipados de un bosque de receptores táctiles que podrían percibir el batir de las alas de una mosca. Los receptores que están mas cerca de la superficie registran hasta el contacto mas suave y otros mas profundos miden la presión. Un ejemplo lo tenemos cuando agarramos a alguien con fuerza en un rescate a vida o muerte, los nervios se disparan en fracciones de segundo y los nervios motores dirigen el movimiento, cuatro mil nervios dirigen cada mano.
Los nervios funcionan tan rápido y el tacto es tan preciso que logran hacer pequeños ajustes de agarre sin darnos cuenta, funcionan más rápido que el pensamiento consciente, eso es lo que nos permite las acciones mas necesarias de todos los días.
Los nervios transmiten sensaciones nerviosas al cerebro incluso cuando no somos conscientes, por ejemplo, cuando nuestra temperatura pasa de 34º, estos mandan señales al cerebro y automáticamente utiliza otros nervios para realizar el proceso de enfriamiento por medio de las glándulas sudoríparas.
Podríamos hablar de cientos de ejemplos con los que demostrar la capacidad de supervivencia de nuestro sistema nervioso, es el que nos ayuda a sobrevivir en el día a día y en las situaciones extremas, el sistema nervioso es nuestra garantía de supervivencia y por ello debemos cuidarlo y prestarle la mayor atención, pues interviene en todas las funciones vitales de nuestro organismo.
Cuidar el sistema nervioso a veces no resulta tan fácil ya que sus funciones son tan complejas y se involucran tantos factores que resulta un poco complicado, pero no imposible.
¿Cómo podemos proteger nuestro sistema nervioso? En quiropráctico Madrid te lo mostramos.
Algunos de los factores que protegen este sistema son:
– La autoestima, cuando uno se quiere es más fácil enfrentar y solucionar los problemas cotidianos.
–El desarrollo de valores personal es como la tolerancia, el respeto, el amor, la solidaridad y otros para mantener un elevado nivel de salud mental.
– Mantenerse productivos y saludables a través de conductas y hábitos.
– Alimentarse bien, haciendo ejercicios físicos, descansando y cuidando la higiene personal.
– Establecer relaciones afectuosas y saludables con los demás, que son la base de una vida tranquila en sociedad. Los problemas con alguien se deben solucionar siempre mediante el diálogo, la tolerancia y en ocasiones nos toca ceder, pactar o ganar. La violencia y el rencor, la envidia, los celos o los complejos ponen en riesgo la salud mental.
– Evitar accidentes que puedan lastimar el sistema nervioso en cualquiera de sus partes. Usar casco siempre que se realice una actividad de riesgo, para evitar los golpes en la cabeza.
–Dormir y descansar suficiente; tomar recesos durante el día y dormir al menos 8 horas diarias.
– Evitar el consumo de tabaco, alcohol u otras drogas que afectan el funcionamiento del sistema nervioso y pueden ocasionar graves enfermedades mentales y hasta la muerte por daños al cerebro.
Si aprovechas estos consejos optimizaras tu salud.