
¿Cómo influye la alimentación saludable?
Sabías que… Hacemos un esqueleto nuevo cada tres meses y una nueva capa de piel cada mes y que, en el transcurso de un año, habremos renovado casi todas las células y tejidos de nuestro cuerpo… ¿Y si es así con qué renovamos nuestro cuerpo y regeneramos nuestros tejidos desgastados?
Pues con lo que comemos, por eso no hay nada más cierto que somos lo que comemos. Las calidades de nuestros alimentos reflejan la calidad de nuestros órganos y tejidos, a menos calidad tejidos más débiles y más sensibles de envejecer y enfermar y a más calidad tejidos más fuertes y sanos.
Os habéis parado a pensar porque hay personas que tienen 50 años y aparentan 70 y otras que tienen 70 aparentan 50. Porque hay personas que se cuidan y cuidan su alimentación y hay otras que ni se cuidan ni se cuidaran, no les importa, personas con obesidad, embarazadas que fuman y beben coca -cola.
Con esto quiero decir que hay que cuidar nuestra alimentación al máximo si queremos una calidad de vida óptima.
Hoy en día la comida basura y los alimentos procesados suelen tener poco valor nutricional y son químicamente alterados para aumentar el atractivo de su paladar,
Estas sustancias añadidas (aditivos, conservantes y colorantes) en muchos casos se convierten en toxicas al digerirse, otras como la fructosa reducen la producción de leptita (hormona reguladora del apetito) disminuyendo la sensación de saciedad, el glutamato mono sódico potenciador del sabor o el aspartamo, que endulza y conserva, estos dos últimos desencadenantes de enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson, por no hablar de los colorantes y los aromatizantes y los problemas neurológicos, de aprendizaje e hiperactividad que están produciendo en la población infantil.
La importancia de la alimentación saludable
Estos factores subyacentes son una de los principales causantes de la enfermedad humana desarrollando muchas enfermedades como la obesidad, diabetes, osteoporosis, enfermedades autoinmunes, trastornos reproductivos, enfermedades coronarias y tal vez la tasa de envejecimiento en sí.
Los alimentos procesados también están hechos para disolverse rápidamente en la boca, para ir comiendo más rápido y en mayor cantidad, a menudo dejándonos llenos, pero no satisfechos.
Afortunadamente, cuando evite los alimentos procesados también evitará automáticamente casi cada uno de estos aditivos alimenticios tóxicos.
Es muy importante que la gran mayoría de personas en el mundo tomemos conciencia de la importancia que tiene comenzar a cuidar la alimentación de nuestra familia y la nuestra, dejando a un lado todas las comidas que puedan perjudicar nuestro organismo y de esta manera tener una vida más saludable.
Por todo esto elige los alimentos de alta calidad. No es necesario optar por sólo lo orgánico o producir nosotros el alimento, aunque ambos son sin duda preferibles, debes buscar productos que contengan la menor cantidad de ingredientes procesados para asegurar un mejor sabor y mejor calidad en nuestras preparaciones. No se puede, por ejemplo, compara la experiencia de comer y disfrutar del grano entero, si por ejemplo eliges arroz blanco en vez de color marrón (integral).
Desde quiropráctico Madrid te aconsejamos buscar panes y pastas con harina de trigo o harina de trigo integral como el primer ingrediente para realzar su sabor y contenido nutricional. Y, por supuesto, elige productos frescos, siempre que sea posible, en lugar del enlatado. Frutas y verduras congeladas son preferibles solo cuando las frescas no están disponibles.
Cuando dedicamos un tiempo a cocinar y prestamos atención a los ingredientes que utilizamos disfrutamos más de la comida y apreciamos más lo que comemos a la vez que nos sentimos orgullosos cuando lo compartimos con los demás
El adquirir comida precocinada se convierte en un habito de comprar y consumir, donde inconscientemente vamos perdiendo la capacidad de cocinar desgraciadamente nos estamos olvidando de darnos lo más importante y nos hemos dejado llevar por la comodidad sin darnos cuenta que tarde o temprano lo pagaremos con la enfermedad.
Hoy en día están más que nunca de moda los programas de cocina, los libros y nos gusta ir a restaurantes de comida en vivo y sin embargo dedicamos más tiempo a ver esos programas y a comer fuera de casa que a recrearnos en la cocina y vigilar nuestra alimentación y la de los nuestros, sin pensar que nuestra comida es nuestra salud y que de ella dependerá nuestra calidad de vida en un futuro inmediato.